¿Cuáles son los gastos deducibles del IVA para los autónomos?
Ese maravilloso momento en el que tienes que hacer la declaración trimestral del IVA…
Qué chistosos somos.
No, ahora en serio. Ya sabemos que es un rollo hacer la declaración trimestral del IVA, pero tiene su lado bueno: que hay gastos de los que puedes deducírtelo.
Y eso es lo que vamos a ver en el artículo de hoy. 😜
Tabla de contenidos
Qué es el IVA
El IVA es un impuesto indirecto al consumo.
¿Y qué narices quiere decir esto? Pues que eres tú, como profesional o empresario el que cobras ese impuesto a tu cliente, pero después Hacienda te lo cobra a ti.
Es decir, que eres como un intermediario entre la Administración Tributaria y el cliente.
Podemos hablar de tres diferentes tipos de IVA:
- IVA repercutido: el que paga tu cliente por tus productos o servicios.
- IVA soportado: el que pagas tú por productos o servicios que compras a tus proveedores.
- IVA deducible: como su nombre indica, es la cuota de IVA que un profesional o empresario (es decir, tú) se puede deducir. Es decir, que Hacienda te lo puede reembolsar al 100% o en parte.
Este último tipo de IVA es en el que nos vamos a centrar en este artículo. Gran parte del IVA soportado por ti será deducible, pero veremos que no siempre es así.
Requisitos formales para la deducción
La normativa exige tres requisitos formales para que el IVA soportado sea a su vez deducible:
- Que provenga de compras de bienes y servicios destinados claramente a la actividad empresarial o profesional.
- Que esté bien documentado, con una factura o similar. Ya te explicamos en este artículo la importancia de las facturas y cómo hacerlas.
- Que esté registrado contablemente y anotado en el libro de registro correspondiente.
Gastos deducibles
De entrada, serían gastos deducibles para los autónomos todos que estén relacionados con su actividad profesional. Por ejemplo, si tienes un ecommerce, todo el material que compres para después venderlo sería deducible a efectos de IVA.
Esto quiere decir que en los casos en los que la relación de esos gastos con la actividad de tu negocio no esté clara puede ser rechazado por Hacienda.
Pero primero vamos a ver los que generalmente acepta Hacienda como deducibles.
Materiales y bienes necesarios para el negocio
Todos los productos y materiales que compres para el desarrollo de tu actividad son en principio gastos deducibles a efectos del IVA.
Cada negocio es diferente, por lo que dependiendo de tu sector y tu actividad podrás deducirte unos materiales u otros.
Si tienes un negocio online, es probable que lo primero que se te venga a la cabeza es una de tus principales herramientas de trabajo (si no es la principal): el ordenador.
¿Y qué pasa si compras un ordenador? Pues que en principio sí que podrías deducírtelo.
De hecho, en la actualidad casi cualquier autónomo puede hacerlo, ya que tanto para gestionar el negocio como para dar visibilidad a la empresa es necesario el ordenador.
Servicios de gestoría o asesoría o cualquier gasto profesional independiente que se necesite
Aquí se incluyen no solos los gastos de un gestor o asesor, sino también, por ejemplo, los de un abogado o notario si esos servicios están relacionados con tu negocio.
Gastos de manutención (comida)
Esto es lo que te puedes desgravar:
- Hasta un máximo de 26,67€ al día en territorio nacional y siempre que sea fuera del municipio en el que resides.
- Hasta un máximo de 48,08 euros si es en el extranjero.
Eso sí, tienes que pagar con tarjeta y pedir copia del ticket y del justificante de pago.
Pero ten cuidado con estos gastos, porque pueden ser comprobados por Hacienda, así que recuerda siempre guardar factura y evita que sean comidas fuera de días y horarios laborales (o sea, que la paellita del domingo no es deducible).
Compra de un vehículo y combustible
Son también gastos deducibles para los autónomos, pero su deducción solo afecta al 50% del IVA.
Este gasto suele ser aceptado por Hacienda, aunque en casos un poco más evidentes puede realizar una comprobación. Por ejemplo: si te compras un Ferrari puede sospechar, es lo que hay.
En cuanto al combustible y gasolina que utilices para tu vehículo, esto es más dudoso y depende de la administración que lo comprueba. Algunas administraciones extienden esta deducción del 50% y otras no.
Publicidad
¡Sí, la publicidad también se incluye en los gastos deducibles para los autónomos! Por lo tanto, si inviertes en Facebook o Instagram Ads para que tu marca tenga más visibilidad estos gastos serían deducibles.
Asistencia a ferias o eventos
Es lógico y necesario que como emprendedor acudas a eventos y ferias, tanto como comprador como expositor. Eso sí, estos eventos tienen que estar relacionados con tu negocio y se tiene que justificar esa relación.
Es decir, que si acudes al Salón del Manga, salvo que esté muy relacionado con tu negocio no se deduciría.
También se incluyen en este tipo de gastos los congresos de formación.
Suscripción a revistas y formación
Esto incluye:
- Suscripciones a revistas o webs que te proporcionan información relevante para tu negocio o sector.
- Si te apuntas a cursos privados de formación (relacionados con tu negocio o sector, claro).
Viajes
Siempre que estén relacionados con la actividad profesional son gastos deducibles para los autónomos las facturas de tren, avión, bus, autopistas…
Eso sí, si Hacienda lo comprueba es necesario justificar ese desplazamiento. Así que si por ejemplo vas a visitar a algún cliente lo que puedes hacer es que firme un parte de visita y lo adjuntes a la factura.
Alquiler
Hacienda te permite desgravar un 30% del espacio que destines a oficina dentro de tu vivienda, siempre y cuando los gastos vayan a tu nombre.
Es decir, que si por ejemplo tu vivienda tiene 100m2 y la oficina mide 10m2, esta constituiría un 10% del total de tu vivienda.
Y como de tu oficina solo puedes desgravar un 30%, sería un 3% de deducción del IVA total de tu factura.
Gastos no deducibles
Por normal general, no podrás desgravar ningún gasto que no esté relacionado con tu actividad profesional. Tienes que ser capaz de justificar ante Hacienda cuál es su uso y qué tiene que ver con tu negocio.
Tampoco se aceptarán:
- Gastos de los que no tengas la factura o recibo.
- Si han transcurrido más de cuatro años desde que te emitieron la factura, ya que pierdes el derecho a declararla.
Por otro lado, hay algunos supuestos concretos en los que el IVA no es deducible:
- Alimentos (con excepciones). Es decir, que la compra del Mercadona no es deducible, pero sí lo es una comida con clientes en un restaurante fuera de tu municipio, como hemos visto antes.
- Tabaco y bebidas.
- Espectáculos o servicios de carácter recreativo. Una pena que no puedas desgravarte el gasto por asistir a tu festival de música favorito, pero es de sentido común.
- Joyas, alhajas, piedras preciosas, perlas y objetos elaborados con oro o platino.
- Bienes o servicios destinados a atenciones a clientes, asalariados o a terceras personas.
- Servicios de desplazamiento o viajes, hostelería y restauración que no estén vinculados a tu actividad.
Esperamos que con este artículo te haya quedado un poco más claro cuáles son los gastos de los que te puedes deducir el IVA.
Y sí, lo sabemos, todo esto de las declaraciones trimestrales del IVA es un lío y te quita mucho tiempo, pero no tiene por qué ser así.
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